El Servicio de Impuestos Internos recibió recientemente una muy necesaria infusión por valor de casi $80.000 millones de dólares en virtud de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) y destinó casi 5.000 millones de esa cantidad a la "modernización de los sistemas empresariales". Con estos fondos, se espera que el IRS amplíe sus servicios digitales, más allá de su actual programa de Comunicaciones Digitales con el Contribuyente (TDC) que, hasta la fecha, no ha estado a la altura de las expectativas. Con este programa se pretendía que tanto los contribuyentes como los profesionales de tributación pudieran comunicarse mejor y compartir información de forma segura. Actualmente, comunicarse con Hacienda es poco menos que una pesadilla. Recientemente se informó de que Hacienda responde al 11% de las llamadas que recibe y más del 50% de la correspondencia queda actualmente sin tramitar. Para combatir este desorden, Hacienda necesita un camino claro hacia mejores comunicaciones digitales. Un intento como tal digitalización se produjo en 2021, cuando el IRS presentó la plataforma TaxPro Account, que todo el mundo pensó entonces que representaba un gran paso adelante hacia un sistema fiscal digital totalmente integrado destinado a beneficiar a los contribuyentes y a los profesionales fiscales. Desgraciadamente, su funcionalidad estaba muy limitada por la incapacidad de la plataforma para permitir la mensajería segura y la posibilidad de cargar documentos. Sin embargo, es de esperar que con la nueva financiación proporcionada por IRA, la Cuenta Tax Pro se amplíe para incluir la siguiente funcionalidad adicional para el profesional de la fiscalidad:
- ver las cuentas en línea de todos los clientes;
- ver todos los cambios y la nueva información publicada en la cuenta de un contribuyente;
- ver todas las notificaciones y cartas enviadas al contribuyente;
- consultar el estado de las devoluciones y solicitudes pendientes;
- ver información sobre las opciones de pago digital;
- cargar los documentos solicitados relativos a notificaciones o correspondencia sobre un asunto fiscal; y
- enviar mensajes a un empleado de Hacienda que esté trabajando en el caso de su cliente.